La primera celda robotizada de FANUC instalada en Portugal fue en Leiria, en una empresa dedicada al desarrollo de estructuras metálicas. En ese momento, MOTOFIL solo servía como intermediario en la venta, con el diseño e instalación del equipo a cargo de otra empresa. Al invertir en un equipo de innovación y desarrollo, MOTOFIL rápidamente comenzó a comercializar e instalar células robóticas con su propia marca. A medida que crecía la confianza en los productos, crecía la lista de solicitudes de soluciones y el conocimiento de la marca. Hoy en día, la empresa desarrolla soluciones robóticas adaptadas a las necesidades específicas de cada cliente, cuenta con delegaciones en España, Brasil y México, exportando soluciones a todo el mundo.
En cuanto al futuro, el Presidente de MOTOFIL está tranquilo porque “nuestra asociación está consolidada, no hay razón para que no mantengamos el éxito que venimos logrando. Hemos construido una excelente relación, tanto personal como profesional, tanto con FANUC Europa como con FANUC Japón. Tenemos que reconocer que el factor suerte estuvo de parte de MOTOFIL por haber seleccionado a FANUC y por, tanto nosotros como nuestros clientes, creemos que el robot FANUC es el mejor del mundo. En tecnología, en el producto en sí y en las soluciones técnicas presentadas. La evolución que han tenido a lo largo de estos años los ha convertido en verdaderos líderes y para nosotros es un valor añadido tenerlos de nuestro lado.”
/ El director de FANUC Ibérica, David Trabal, estuvo en MOTOFIL para felicitar a la empresa por sus 40 años.